El restaurante El Serbal abrió sus puertas en el céntrico barrio de Puertochico, en Santander, en 1999. La cocina de El Serbal se sirve de  los grandes productos de Cantabria para desarrollar platos creativos que no olvidan, sin embargo,  los sabores de siempre. Cuenta con una decoración de corte moderno, en colores cálidos, amplia separación entre la mesas, servicio cuidado y atento… La conjunción de la cocina y el ambiente de El Serbal han contribuido a su estrella Michelín, que luce en la fachada del restaurante de Santander desde 2003.

En El Serbal, en la mano de los cocineros se nota una sensibilidad, que transmiten a sus platos, con un cariño muy especial.

La bodega que tienen es un verdadero espectáculo, con más de 300 referencias.

Los postres mantienen el buen nivel de la cocina.