AutorGerardo Izquierdo
DificultadIntermedia

Las semillas, y por extensión la propia planta, reciben diversos nombres según la región; entre los más comunes están frejol, frijol​​ o fríjol, ​​​ frisol, habichuela, ​​ caraota, ​ poroto, ​​ judía, ​ fréjol, haba y alubia

Seleccionar comensales7 Comensales
Preparación10 minsCocinado10 minsTiempo Total20 mins

 500 g Alubias hechas
 50 g Morcilla
 Agua
 Sal
 Aceite

1

Preparamos una alubiada, y si sobran alubias con ellas hago la crema.
En mi caso son alubias congeladas de hace 1 mes. Para la crema, las descongelo el día anterior.

2

Abro la morcilla, y utilizo unos 50 gramos aproximadamente, que los añadiré a las alubias.

3

Trituro las alubias junto a la morcilla. Al estar descongeladas, o si fueran hechas el día anterior, la alubia absorve mucha agua, con lo que quedaran espesas, no te preocupes, porque luego le damos el punto de densidad que queremos. Si quieres que queden más sedosas, puedes añadir un poco de nata.

4

Una vez batidas, las colamos y ponemos al fuego removiendo constantemente, vamos añadiendo un poco de agua, hasta encontrar el punto de cremosidad que buscamos. Al añadir el agua, recordar rectificar el punto de sal. Y ya lo tendremos.

5

Servir con un chorrito de aceite virgen, y a disfrutar.

6

7

Ingredients

 500 g Alubias hechas
 50 g Morcilla
 Agua
 Sal
 Aceite

Directions

1

Preparamos una alubiada, y si sobran alubias con ellas hago la crema.
En mi caso son alubias congeladas de hace 1 mes. Para la crema, las descongelo el día anterior.

2

Abro la morcilla, y utilizo unos 50 gramos aproximadamente, que los añadiré a las alubias.

3

Trituro las alubias junto a la morcilla. Al estar descongeladas, o si fueran hechas el día anterior, la alubia absorve mucha agua, con lo que quedaran espesas, no te preocupes, porque luego le damos el punto de densidad que queremos. Si quieres que queden más sedosas, puedes añadir un poco de nata.

4

Una vez batidas, las colamos y ponemos al fuego removiendo constantemente, vamos añadiendo un poco de agua, hasta encontrar el punto de cremosidad que buscamos. Al añadir el agua, recordar rectificar el punto de sal. Y ya lo tendremos.

5

Servir con un chorrito de aceite virgen, y a disfrutar.

6

7

Crema de alubias