La salsa Roquefort, a quien le guste el queso, es exquisita y combina estupendamente con pastas, carnes incluso ensaladas.
Preparamos ingredientes. Aquí las cantidades van a variar; si os gusta la salsa más densa, además de tener que dejarla enfriar, tenemos que echar más queso y menos nata y viceversa si la queréis más ligera y más suave de sabor. Para que quede intermedia, un pack de 200gr de nata y 200 gr de queso y a partir de ahí a jugar. Interviene también el tipo de nata y por supuesto, no todos los Roquefort son iguales.
Pongo a calentar una cazuela (no hace falta mucho fuego), y añado la nata y el queso en pedazos. Voy removiendo, hasta ver que el queso se ha fundido por completo, y ya la tenemos.
Recordar el toque para la densidad, por ejemplo para carnes a mi me gusta más densa, sin embargo para pastas me gusta más ligera. Por tanto la densidad de la salsa estará en vuestras manos.
Ingredients
Directions
Preparamos ingredientes. Aquí las cantidades van a variar; si os gusta la salsa más densa, además de tener que dejarla enfriar, tenemos que echar más queso y menos nata y viceversa si la queréis más ligera y más suave de sabor. Para que quede intermedia, un pack de 200gr de nata y 200 gr de queso y a partir de ahí a jugar. Interviene también el tipo de nata y por supuesto, no todos los Roquefort son iguales.
Pongo a calentar una cazuela (no hace falta mucho fuego), y añado la nata y el queso en pedazos. Voy removiendo, hasta ver que el queso se ha fundido por completo, y ya la tenemos.
Recordar el toque para la densidad, por ejemplo para carnes a mi me gusta más densa, sin embargo para pastas me gusta más ligera. Por tanto la densidad de la salsa estará en vuestras manos.
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