La Historia de La Era se remonta a más de 200 años siendo en su origen un caserío de labranza perteneciente a Moisés y Beatriz, bisabuelos de las actuales propietarias Marta y Susana. Las cuales rehabilitaron la antigua casona, convirtiéndola en el actual restaurante.

Es un restaurante que está a pie de carretera que va de Nanclares a Berberana. Lo digo porque además de gastrónomo, soy motero, y las rutas para llegar aquí son muy bonitas. Os encontraréis con una casona, que según entras en el bar, te sientes envuelto en un ambiente muy acogedor, propiciado, por la bonita chimenea, la decoración y la calidez con la que te atienden. Además la barra de pintxos invita a quedarse a comer.

Tienen una terraza muy acogedora.

Como decía, tiene una barra de pintxos que invitan a quedarse a comer.

No encontraréis mejores gildas en kilómetros a la redonda.

El concepto del restaurante está basado en trabajar con buena materia prima y bien trabajada de forma tradicional, dentro de un ambiente muy cálido donde disfrutar de los ingredientes y de la compañía. Os dejo una muestra que nos enseña que aquí el producto es de primerísima calidad.

Se encuentran en la cuna del Perretxico, pero también abundan Cantarelus y Boletus. Y en este restaurante les sacan el máximo provecho.

Te ofrecerán marisco de primera línea, apostando con lo mejor.

Además tendrás opciones de ricas alubiadas, buena cecina, ricas ensaladas entre otros ricos platos.

Buena tempura de verdura, o una alcachofa con yema de huevo maravillosa.

Muy buenos pescados, como ventresca a la brasa, y buenos guisos de carne.

Como no podía ser de otra forma, los postres caseros y riquísimos.

Bueno, ya conocéis mejor la taberna La Era y si sois moteros o no, y os gustan los paisajes de una gran naturaleza, no dudéis en pasar a visitar al personal de este restaurante, porque lo pasaréis genial.

Es un verdadero LUJO, que en un pueblo de sólo 18 habitantes, exista un restaurante de tanto nivel.

ZORIONAK a todo el equipo de la Taberna La Era.