Taskas

El Asador Taskas se encuentra en el parque empresarial Aeropuerto de Bilbao, detrás de la Estación de Servicio Avia, en la salida del Aeropuerto. Es el restaurante más cercano al Aeropuerto de Bilbao -a solo 5 minutos andando desde la terminal del aeropuerto-.

El Taskas, como normalmente le llaman sus habituales, está dirigido por Angel Velo y cuenta con un gran equipo profesional detrás de el, tanto es así, que de verdad os digo que el trato no es que sea exquisito, que lo es, sino que aquí van más allá y son como de la familia o tu de la suya, es decir, el Taskas está compuesto por una gran familia.

Tiene un comedor grande y dos comedores reservados, que se pueden hacer uno sólo, y tienen un parking privado muy grande. Aunque en la foto no se aprecie, además de la terraza en el tejado, tiene una nueva terraza cubierta a la derecha de la puerta de acceso.

Ahora hablemos de su cocina. Se caracterizan por la alta calidad de los productos que manejan, pero lo mejor de todo es que los tratan con extremo cariño, con lo que salen unos platos realmente fabulosos.

Empezando por los entrantes, con un salmón a la naranja, excepcional, o unas croquetas. Riquísimas anchoas o unos pimientos del Apurtuarte únicos.

Las mollejas las bordan y los camarones a la sartén están buenísimos

Los mariscos, son de gran calidad y la plancha la manejan muy bien, por lo que el resultado es delicioso.

Un rico arroz con Bogavante.

Los pescados vienen aleteando hasta la mesa, podéis probar cualquiera, porque los preparan de lujo, tanto el rodaballo, el rey, o una rica merluza en salsa con su kokotxa, almejas y huevo poché.

La degustación de bacalao, al mismo nivel, ya sea a la bizkaina o al pil pil.

Las carnes también son muy buenas, desde el cordero, solomillo al estilo de la abuela, con huevos y patatas (a mis hijos les encanta), en definitiva una delicia, y por supuesto un buen txuletón.

Los postres son espectaculares, sobre todo su postre estrella la tostada de pan anisada rellena de manzana con natillas y arroz con leche …….. una pasada. Su tarta de queso o los canutillos de Bilbao con crema pastelera y chocolate son otro vicio.

Además cuenta con una buena bodega de vinos y una magnífica bodega de licores.

Sólo me queda recomendaros el restaurante, pero debéis ir tranquilosy así poder disfrutar de su ambiente reposado y familiar. Gracias a Angel y a su equipo, de quien yo destacaría a Rober, quien lleva con el muchos años y por supuesto Ainhoa.