Traducción del inglés-Mejillón es el nombre común usado para miembros de varias familias de moluscos bivalvos, de hábitats de agua salada y de agua dulce. Estos grupos tienen en común una concha cuyo contorno es alargado y asimétrico en comparación con otras almejas comestibles, que a menudo son más o menos redondeadas u ovaladas.
Preparamos todos los ingredientes, que no son pocos.
Escogemos los ingredientes de la primera parte de la receta.
Limpiamos bien los mejillones.
Sobre una sartén o cazuela, añadimos un chorro de vino blanco o txakoli. Y la ponemos al fuego.
Seguido añado los mejillones.
Veréis que poco a poco se van a ir abriendo, debido al calor. En unos 2 minutos si los tapo con una tapadera, ya empezaran a abrirse.
Según se vayan abriendo, los retiro uno a uno del fuego. Recordar, no retiréis todos a la vez, cuando se hayan abierto, ya que los primeros en abrirse se quedaran pequeños y secos.
Una vez que se hayan enfriado un poco, retiro el mejillón de las conchas, y de entre las conchas elijo siempre las mejores y más adecuadas para rellenar, cortando bien la barbilla.
En el siguiente paso, pico bien los mejillones y la verdura.
En una sartén con un poco de aceite, vamos pochando la verdura. Recordar, la pochamos, no la freímos.
Vamos viendo como la verdura se ablanda y va cambiando de tonalidad.
Cuando ya la tengamos bien pochada, añadimos los mejillones troceados.
Dejamos que se haga todo junto durante unos 3 minutos.
A continuación añadimos un chorro de vino blanco o txakoli.
Dejamos que se vaya haciendo todo junto, durante unos 6 minutos. De esta forma el alcohol se evaporará y se unificaran los sabores.
Ya tendríamos la primera parte de la receta. La damos el punto de sal y la reservamos.
Preparamos la bechamel, seleccionando los ingredientes.
En una sartén al fuego, añado la mantequilla.
Dejo que se deshaga la mantequilla.
A continuación añado la harina.
Removiendo constantemente, dejo que la harina se vaya haciendo, por lo menos durante 2 minutos.
Añadimos la leche (y si queremos un poco de nata), poco a poco y no paramos de remover hasta que tengamos la textura de la bechamel que queramos, y lo más importante, sin ningún grumo.
Le damos el punto de sal y ya tenemos la bechamel preparada.
Pasamos a la última parte de la receta, donde haremos la masa final, mezclando la masa de mejillones que habíamos reservado, con la bechamel.
Lo removemos muy bien, para que se mezclen los sabores, y lo cocinamos todo junto por unos 3 o 4 minutos.
Rellenamos las conchas de mejillón.
Una vez preparada la masa, vamos rellenando las conchas de mejillón, y los pasamos por huevo y luego por pan rallado.
Ya los tenemos listos para freír, o congelar.
Freímos los mejillones en una sartén al fuego, con aceite de oliva, y los sacamos sobre papel absorbente, para quitar el exceso de aceite.
Ya están listos para disfrutar de un buen plato.
Ingredients
Directions
Preparamos todos los ingredientes, que no son pocos.
Escogemos los ingredientes de la primera parte de la receta.
Limpiamos bien los mejillones.
Sobre una sartén o cazuela, añadimos un chorro de vino blanco o txakoli. Y la ponemos al fuego.
Seguido añado los mejillones.
Veréis que poco a poco se van a ir abriendo, debido al calor. En unos 2 minutos si los tapo con una tapadera, ya empezaran a abrirse.
Según se vayan abriendo, los retiro uno a uno del fuego. Recordar, no retiréis todos a la vez, cuando se hayan abierto, ya que los primeros en abrirse se quedaran pequeños y secos.
Una vez que se hayan enfriado un poco, retiro el mejillón de las conchas, y de entre las conchas elijo siempre las mejores y más adecuadas para rellenar, cortando bien la barbilla.
En el siguiente paso, pico bien los mejillones y la verdura.
En una sartén con un poco de aceite, vamos pochando la verdura. Recordar, la pochamos, no la freímos.
Vamos viendo como la verdura se ablanda y va cambiando de tonalidad.
Cuando ya la tengamos bien pochada, añadimos los mejillones troceados.
Dejamos que se haga todo junto durante unos 3 minutos.
A continuación añadimos un chorro de vino blanco o txakoli.
Dejamos que se vaya haciendo todo junto, durante unos 6 minutos. De esta forma el alcohol se evaporará y se unificaran los sabores.
Ya tendríamos la primera parte de la receta. La damos el punto de sal y la reservamos.
Preparamos la bechamel, seleccionando los ingredientes.
En una sartén al fuego, añado la mantequilla.
Dejo que se deshaga la mantequilla.
A continuación añado la harina.
Removiendo constantemente, dejo que la harina se vaya haciendo, por lo menos durante 2 minutos.
Añadimos la leche (y si queremos un poco de nata), poco a poco y no paramos de remover hasta que tengamos la textura de la bechamel que queramos, y lo más importante, sin ningún grumo.
Le damos el punto de sal y ya tenemos la bechamel preparada.
Pasamos a la última parte de la receta, donde haremos la masa final, mezclando la masa de mejillones que habíamos reservado, con la bechamel.
Lo removemos muy bien, para que se mezclen los sabores, y lo cocinamos todo junto por unos 3 o 4 minutos.
Rellenamos las conchas de mejillón.
Una vez preparada la masa, vamos rellenando las conchas de mejillón, y los pasamos por huevo y luego por pan rallado.
Ya los tenemos listos para freír, o congelar.
Freímos los mejillones en una sartén al fuego, con aceite de oliva, y los sacamos sobre papel absorbente, para quitar el exceso de aceite.
Ya están listos para disfrutar de un buen plato.
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.